Quito, una de las ciudades ma's hermosas del mundo siempre ha brillado por la ausencia de verdaderas y consagradas bandas de rock. El ver en vivo a una banda de alto nivel solo se lo lograba mediante la Tv; el escuchar un energizante solo unicamente se lo podia hacer en algun bar de la bohemia capital; y compartir las disntintas sencaciones que dichos sonidos produce, solo se podía expresar con un interno, silencioso y personal comentario.
A pesar de que buenas bandas como Def Leppard, Bon Jovi o INXS ya habian visitando antes a la mitad del mundo, todavia hacia falta una banda que lograra revivir el espiritu rockero; todavia faltaba aquel sentimiento que incendie los recuerdos juveniles de varias generaciones que en alguna epoca de su vida, vistieron con chompas de cuero, jeanes ajustados y con pelo largo.
Aquel di'a llego' con el concierto de Deep Purple. Un par de meses antes de que se presentaran, la gente se puso eufórica, no podían creerlo. Por fin una verdadera banda, una leyenda viviente tocaria en el reducido escenario del Ágora de la Casa de la Cultura.
Con tanta expectativa, el 6 de marzo del 2008, di'a en el cual se presentaban los Deep, finalmente habia llegado. Las puertas se abrieron e inmediatamente la gente lleno' los graderios con la ilusión de poder ver al fin, a una buena banda. Pero, que' tiene que ver todo esto con el concierto the doors?
Pues bien, mientras toda la atención, expectativa e ilusión se basaba en este concierto, la cara del desaparecido Jim Morrison con el respectivo logo "the doors" como fondo se proyectaban en las dos pantallas ubicadas a los costados del escenario, anunciando asi, que la legendaria banda se presentara' en ese mismo escenario pocos meses después.
En ese instante, mientras la gente se daba cuenta del increíble anuncio que se estaba presentando, muchos comenzaron a gritar, aplaudir y sobre todo a festejar un suceso que en la vida, que ni en mil an'os luz se hubieran imaginado ver. Si, THE DOORS, una de las mejores, exquisitas y sobre todo inmortales bandas de rock vendría a Quito.
Asi', se dio' paso al concierto de Deep, ya con la Ilusión de ver próximamente a THE DOORS.
19 DE ABRIL DEL 2008
Para mi, como asi también para muchos, este di'a seria todo lo que un buen amante de la poesía y del rock habia anhelado. Si', finalmente el suen'o de escuchar a los DOORS en esta hermosa ciudad rompió los esquemas de una utopía musical que hasta el momento habia sido perfecta. Uno de los detalles que me parece interesante resaltar, es que unos 15 di'as antes del concierto, Marcos Echeverria, promotor de CITY LIVE CONCERTS (empresa organizadora) , anuncio' que las entradas estaban totalmente agotadas. El denomidado SOLD OUT era un hecho, lo cual no habia sucedido con deep, ni con otra banda anteriormente presentada. La razón? pues, simplemente eran los Doors.
Al rededor de las 3 de la tarde, la fila de ingreso al Agora se extendia hacia la Av. 6 de diciembre dando la vuelta completamente hasta rodear el parque del Arbolito. Chaquetas de cuero negras, camisetas de Jim, banderas del nuestra patria, pantalones apretados y gafas polarizadas recreaban el estilo de las distintas generaciones que se dieron cita en aquel escenario. Nin'os miraban maravillados el entorno que los rodeaba mientras sujetaban la mano de su padre y maestro; los adolecentes coreaban las canciones con sus amigos y la gente adulta conversaba con su pareja con el afan de volver a recordar aquellas noches de gloria juvenil, en las que el pelo largo no solo era un look, sino un sello de identificación social como "amante de la buena música".
Una vez adentro del escenario, tuve la oportunidad de estar en el back stage mirando con detenimiento las distintas guitarras Gibson que Robbie Krieguer utilizaria durante su presentación. Allí estaban, reposando y brillando con la luz del escenario sobre mi maravillado rostro por la perfeccion de los detalles que cada una de estas poseía. Aproveche el momento para tomar algunas fotos con mi modesta ca'mara digital tratando de capturar el mejor a'ngulo de todo lo que me rodeaba; simplemente estaba siendo seducido, cautivando y embrujado por el maravilloso ambiente que se estaba comenzado a sentir por la cantidad de gente que colmo' la capacidad del Ágora. La hora cero, cada vez se hacia ma's larga, intrigante y desesperante; mi afa'n como asi' también el del pu'blico por ver a nuestros ídolos en vivo, se hacia esperar.
Mientras mi espalda y mis piernas estaban sintiendo el dolor por la fatigante espera, todas las luces se apagaron. La gente no dudo en lazar un grito de elogio, alegría y aliento. La utopía musical, el suen'o inalcanzable, aquel momento que solo podía tomar lugar y espacio en la imaginación estaba por materializarse. Con una lluvia de luces blancas y azules, asemejando la cristalización de un suen'o, eran acompañadas con la apocalíptica canción de Carmina Burana de fondo. Posteriormente, una voz extranjera, como aquellas que introducía a Jim y al grupo en varios de los programas de tv de los ano's sesenta, exclamo' espontáneamente: LADIES AND GENTLEMAN, FROM LOS ANGELES CALIFORNIA..............." THE DOORS"......
Aquel instante, aquel momento, aquel preciso segundo no sabia que pensar, que sentir que hacer. Mis palabras tartamudeaban, mi corazon se acelero', mi cuerpo se paralizo' y mi primer reflejo fue un grito: " ahhhhhhhhhhhhhhhhhh the doors!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!" en ese momento, los acordes de LOVE ME TWO TIMES enloquecieron al pu'blico obligándoles a saltar entre risas y gritos de felicidad. Simplemente, los DOORS ERAN REALES, ESTABAN PRESENTES Y ESTABAN VIVOS.
Tengo que reconocer que hasta el momento no tengo palabras para describir el nivel de extasis, pasion, placer y sentimentalismo que este concierto me produjo. Las letras, los acordes, los remates, las teclas, el show y todo, absolutamente todo, tomo' ma's fuerza con dos hechos que sellaron el concierto con el espíritu THE DOORS. El primero sucedio' al final de la tercera cancio'n " love her madly", cuando una intoxicante nube de gas lacrimógeno invadió el escenario. En ese mismo momento, la banda se retiro' de la tarima haciendo alusio'n a sus 'epocas revolucionarias y controversiales cuando el rey lagarto lideraba la banda. Ese instante, marco' un hito esencial dentro del concierto. La presentación en Quito fue la excepción de la gira Suramericana, ya que estos como este, hicieron que la identidad de Jim estuviera presente.
Asi' pasaron los minutos con el miedo de no volver a ver a la banda actuar. Finalmente , salieron a predicar nuevamente el legado del rey lagarto en cada condenado acorde. El concierto siguio'.
El segundo hecho del que anteriormente hable, se centro' cuando Brett Scalion (vocalista), recogio' un cartel de escenario que dacia: WE HAVE BEEN WAITING FOR YOU FOR ABOUT 40 YEARS/ LES HEMOS ESTADO ESPERANDO POR 40 AN'OS" y en el reverso decia " JIM IS HERE/ JIM ESTA' AQUI". Simplemente, este es un hecho de esos que te eriza la piel y te saca una sonrisa y te das cuenta, cuan poderoso el la magia de la música.
Creo que no tengo que escribir ma's de este concierto, por que los sentimientos, sensaciones y placeres que este concierto genero', no pueden ser descritas. Aquellos que estuvieron presentes en el concierto me sabran comprender y los que no estuvieron, por que creyeron que la banda sin Jim no podia, se perdieron del mejor concierto que puede haber en la historia. Simplemente, para mi ha sido el mejor evento de rock de todos los tiempos y que jamas podraa haber en Quito.
The doors en Quito, es el mejor concierto al que he asistido en mi vida, y vaya que he ido a varios conciertos en todo el mundo.
Simplemente, THE DOORS fue lo mejor y dudo que un concierto logre superarlo
